Elevo al cielo la risa y te doy las gracias, madre, porque de tu vientre brotó mi vida y de tu alma, mi alma misma.
Que sea de tu reseña mi estirpe heredera, que me llamen por tu nombre y que en tu tierra renazcan mil veces las flores.
Por tu abrazo grande y por tu sonrisa amable,
por los gestos,
por la palabras de menos y por las miradas al reloj,
por tu emoción mía,
por la preocupación prematura,
por mí y por dejarme ser,
por acompañarme y por dejarme ir.
por la vida, GRACIAS, Madre.
Que sea de tu reseña mi estirpe heredera, que me llamen por tu nombre y que en tu tierra renazcan mil veces las flores.
Por tu abrazo grande y por tu sonrisa amable,
por los gestos,
por la palabras de menos y por las miradas al reloj,
por tu emoción mía,
por la preocupación prematura,
por mí y por dejarme ser,
por acompañarme y por dejarme ir.
por la vida, GRACIAS, Madre.
sJt