sino un mañana mejor que no llega... que por más cerca que estemos, estaremos siempre lejos.
En un presente irreverente y lento, vemos que cada mañana continúa siendo presente.
En esta vida que nos ha dejado en el vestíbulo, fuera de ella, alardeando de darlo todo, y dándolo... es que nos quedamos sin nada.
En la soledad maldita, en la que nada habita sino un ausente en compañía.
Para todos aquellos que algún día se quedaron esperando. Un saludo.